
Hoy quiero compartir una de mis recetas favoritas, las deliciosas galletas de mantequilla de la abuela Antonia. Cada vez que la hago su sabor me recuerda a mi infancia. Una receta que ya ha pasado por varias generaciones de la familia.
Lo peor… ¡son un vicio!
La semana pasada, mi hija y yo decidimos prepararlas juntos, y fue una experiencia maravillosa, llena de risas, diversión y, por supuesto, mucha mantequilla. Estas galletas son perfectas para disfrutar en familia, y además, son muy fáciles de preparar.
A continuación, voy a guiarte paso a paso y te daré algunos consejillos para que os queden perfectas. Busca al peque pinche que tengas en casa y ¡ manos a la masa!
Manteca o mantequilla… ¿es lo mismo?
Antes de empezar con la receta, es importante aclarar una duda muy común: ¿manteca y mantequilla es lo mismo? Aunque a veces se utilizan indistintamente en algunas recetas, no son exactamente iguales.
La mantequilla se obtiene a partir de la nata de la leche, generalmente de vaca, y contiene un alto porcentaje de grasa láctea. Mientras que la manteca es de origen animal (grasa de cerdo) o vegetal (grasa de palma o coco, por ejemplo). Aunque ambas son grasas, la mantequilla tiene un sabor y aroma característicos que la hacen especial en repostería.
Para nuestras galletas de mantequilla, utilizaremos como su nombre indica mantequilla, ya que le dará ese sabor inconfundible y delicioso que tanto nos gusta. Ahora sí, ¡vamos con la receta!
Receta fácil

Galletas de mantequilla caseras de la abuela
Equipamiento
- Batidora de mano
- horno
Ingredientes
- 200 gr mantequilla a temperatura ambiente
- 120 gr azúcar
- 1 cucharadita esencia de vainilla
- 360 gr harina
- 1/2 cucharadita sal
Elaboración paso a paso
Mezclamos la mantequilla y el azúcar
- Primeramente, en un bol grande, mezclamos la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar hasta que tengamos una crema suave y homogénea.200 gr mantequilla, 120 gr azúcar
Añadimos el huevo y la vainilla
- Seguidamente, añadimos la esencia de vainilla a la mezcla de mantequilla y azúcar. Batimos bien para que todo quede perfectamente integrado.1 cucharadita esencia de vainilla
Agregamos la harina y la sal
- Tamizamos la harina junto con la sal y vamos añadiéndola poco a poco a la mezcla anterior. Removemos hasta que la masa la veamos uniforme y la notemos fácil de manejar.360 gr harina, 1/2 cucharadita sal
Enfriamos la masa
- Envolvemos la masa en papel transparente, mi consejo es que demos forma de rollito a la masa para que luego sea más fácil cortarla y refrigeramos durante al menos 30 minutos. Esto ayuda a que la podamos manipular mejor y que las galletas mantengan su forma al hornear.
Precalentamos el horno y preparamos las bandejas
- Precalentamos el horno a 180°C y vamos forrando dos bandejas para horno con papel de hornear.
Cortamos las galletas
- A continuación, cortamos las galletas en rodajas de aproximadamente 1cm de grosor y las vamos colocando en las bandejas, dejando un espacio entre ellas para que no se peguen cuando crezcan.
Horneamos las galletas
- Horneamos durante 10-12 minutos o hasta que estén ligeramente doradas. por los bordes. No te preocupes si alguna la notas más blandita, ya que después se endurecen. Dejamos enfriar las galletas en las bandejas durante unos minutos antes de servirlas.
Notas
- Mantequilla a temperatura ambiente: Asegúrate de que la mantequilla esté a temperatura ambiente antes de empezar. Si está muy fría, será difícil de mezclar, y si está demasiado blanda, la masa será pegajosa y difícil de manejar.
- No batir en exceso: Al mezclar la mantequilla y el azúcar, batimos hasta que tengamos una mezcla cremosa, pero no en exceso. Si batimos demasiado puede dar más aire de la cuenta a la masa, y ello hará que las galletas crezcan más en el horno.
- Enfriar la masa: No te saltes el paso de enfriar la masa en el frigorífico. Este paso es fundamental para que las galletas mantengan su forma al hornearse, si vas con prisas puedes meterlas unos minutos en el congelador y así ahorras tiempo.
- Espesor de la masa: Al estirar la masa, tratamos de mantener un grosor uniforme de alrededor de 5 mm. Si las haces demasiado finas, podrían quemarse fácilmente; si las haces muy gruesas, podrían quedar crudas por dentro. Mira el truquito que te indico en el paso a paso de darle a la masa forma de rollito antes de envolverla en el film.
- Vigila el horno: Cada horno es diferente, así que vigila tus galletas mientras se hornean. Cuando veas que los bordes empiezan a dorarse ligeramente, es momento de sacarlas del horno.

¿No te convence o te falta algún ingrediente?
¡Puedo recomendarte una receta alternativa! 👌
¿Se puede congelar la masa?

¡Claro que sí! De hecho para la repostería que tienen que llevar los niños al cole es una excelente opción si quieres tener galletas listas para hornear en cualquier momento. Aquí te explico cómo hacerlo:
- Preparamos la masa siguiendo los pasos de la receta y, en lugar de enfriarla en la nevera, envolvemos el rollito de masa en papel film transparente.
- Metemos la masa ya envuelta en una bolsa de congelación y la sellamos para evitar que entre aire y se forme escarcha.
- Etiquetamos la bolsa con la fecha y el tipo de galletas para que no olvidemos lo que hay dentro y cuánto tiempo lleva congelada.
- Podemos conservar la masa congelada durante 3 meses.
Cuando quieras hornear las galletas, sigue estos pasos:
- Descongelamos la masa en la nevera durante unas horas o toda la noche.
- Una vez que la masa esté descongelada pero aún fría, continuamos con los pasos de la receta: estiramos la masa, cortamos las galletas y las horneamos.
- Ajustamos el tiempo de horneado si es necesario, ya que las galletas podrían tardar un poco más en hacerse si la masa está muy fría.
Así que ya lo sabes, congelar la masa de galletas de mantequilla es una buena forma de tener galletas caseras siempre listas, bien para una merienda inesperada o si no tienes mucho tiempo para prepararle la repostería a los niños el día que tienen que llevarla al colegio ¡Disfrútalas en cualquier momento!